Con pequeños proyectos en Rioja, Arlanza y Navarra, el francés Olivier Rivière es uno de los más claros representantes de la nueva hornada de pequeños productores que han surgido en España en la última década. Llegó a nuestro país en 2004 para trabajar con Telmo Rodríguez, pero muy pronto empezó a comprar uva y elaborar por su cuenta. En los últimos años además se ha hecho con viñedos propios en distintas zonas que, fiel a su filosofía borgoñona, elabora por separado.