"La historia comienza con Jean Darroze y su restaurante en Villeneuve-de-Marsan. Enamorado de su suroeste y de su tradición centenaria, este cocinero de culto de la gastronomía de las Landas introdujo a su hijo Francis en las artes culinarias, en los grandes vinos, en los finos aguardientes gascones. Cultivando este gusto por la tradición, por la autenticidad, Francis Darroze, viajando con su padre, un enófilo experimentado y exigente, a través de este famoso terroir de Bas-Armagnac y saboreando los tesoros escondidos en las profundidades de las pequeñas propiedades, se convirtió en un verdadero cazador de armagnacs de propietario. Creó su empresa comercial en 1974. Su hijo Marc, enólogo de formación, siguió sus pasos en 1996. Ambos complementarios, ambos ?cazadores de tesoros?, como los llamó Martine Nouet en su libro ?Aguas de vida: la guía?, He recorrido durante todos estos años las tierras de Armagnac en busca de este oro líquido que os ofrecen. Cazadores de tesoros ante todo por gusto, pero también para satisfacer a una clientela fiel en busca de aguardientes de calidad, fueron juntos los descubridores de Armagnacs. Hoy, Marc Darroze vela solo por la empresa, ya que Francis Darroze se ha jubilado en forma activa y merecida. Continúa la labor de guardián, a veces de anticuario, iniciada por su padre para hacernos accesibles estos tesoros."